El automóvil, fue adquirido por un empresario de la localidad de Arnsberg, en el occidental estado de Renania del Norte-Westfalia, que lo quiere usar como objeto publicitario.
Por ello, el primer sello oficial en la documentación del automóvil lleva todavía el escudo de la extinta República Democrática Alemana, cuando Merkel, que contaba 36 años, era portavoz del último gobierno de la RDA.
De los papeles del coche se desprende además que Merkel mantuvo el vehículo en su poder hasta 1995, cuando lo traspasó a su esposo, el científico Joachim Sauer, quien finalmente acabó vendiéndolo un año después.
El viejo automóvil de Merkel no deja de ser una ganga, ya que hace unos años la subasta en ebay de otro Volkswagen Golf, que fue propiedad de Josef Ratzinger antes de convertirse en el papa Benedicto XVI, reportó a su vendedor 190 mil euros.
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